Preguntas Frecuentes
Sí, si sustituyes tu caldera debes exigir que te emitan un certificado de sustitución de la caldera. De esta manera te evitas problemas ya que las compañías suministradoras te lo pueden pedir
Cuando se presenta un problema por el estilo, debemos verificar que el mismo no tenga burbujas de aire, ya que este puede ser el problema. Para ello se recomienda hacerle mantenimiento y sacarle el aire que pueda existir dentro de los radiadores.
Tus vecinos te han dicho que no la apagan nunca y que así ahorran gas.
La respuesta es, depende.
Es cierto que cuando la casa está fría la caldera gasta más hasta que consigue una temperatura de confort.
Si tu casa está habitada todo el día puede ser aconsejable intentar mantener una temperatura de confort siempre que esta no sea alta y gestionemos la caldera con un termostato modulante y por la noche bajar algunos grados.
Si te vas ausentar durante unas cuantas horas es mejor apagarla.
El aire en los radiadores es un efecto que se produce por la descomposición del agua en oxígeno e hidrógeno por causa de la electrolisis al circular por los radiadores. Las caldera incorporan un purgador automático que es capaz de soltar ese aire si pasa por la caldera, pero a veces sobre todo en radiadores nuevos la cantidad que producen es muy alta y por el diseño de la instalación se queda en los radiadores lo que produce ruido e incluso puede llegar a dejar de calentar. Es entonces cuando tenemos que purgarlo. Si el radiador calienta bien y no hace ruido no es necesario purgarlo.
El agua de los radiadores a veces parece sucia pero no conviene cambiarla. Esa agua ya ha perdido todo el oxígeno disuelto por lo que tiene muy limitada el poder de oxidación. Si la cambiamos comenzaríamos el proceso oxidando partes interiores de los elementos de la calefacción así como la producción de aire y el consiguiente purgado.